6 abr 2021

Poema a la ortografía(reedito) de 2019.



 Tuve un sueño terrible,

un punto me corría
y al doblar en la esquina
un gerundio me seguía.
Mientras corría espantada,
una coma me alcanzó
Y me dijo: olvidaste
ponerme en una oración.
El pretérito perfecto
a la cárcel me llevó,
y mi futuro imperfecto
un traje a rayas me dio.
El punto vino a mi celda
y me dijo con dolor:
No respetas ni una tilde
¡Nos crispas con tanto error!
¡Ay reglas de ortografía!
Perdonen mi puntuación,
mis acentos y mis verbos,
rogué… mas ninguno me escuchó.
El alfabeto era el juez.
Un diptongo mi abogado,
me mandaron a la cárcel,
sin paréntesis… y al primar
io.
Fiaris por decisión propia bloguera por casualidad.