Los hechos se narran desde la visión de un narrador (que puede o no coincidir con el autor), que puede contar la historia en primera, segunda o tercera persona.
El relato puede ser real o ficticio.
Los acontecimientos se desarrollan en un determinado espacio y tiempo.
La cantidad de personajes puede variar (no existe un límite máximo) y pueden ser principales, si llevan adelante los acontecimientos, o secundarios, si tienen menor influencia en el correr de los hechos.
Tiene un fin específico (entretener, enseñar o informar).
Cuentan con una estructura interna (introducción, nudo, desenlace) y una externa (capítulos, actos, secciones, partes o tomos).