Luchar por ser amado y no luchar por el amor.

Deseamos ser amados y rápidamente condenamos a aquellos que no nos aman.
Creemos que la vida viene con garantía de que seremos amados.
No se nos ocurre que lo mucho o poco que nos amen esta directamente 
relacionado con nuestra capacidad de amar.
Conocemos a personas que siempre están de mal humor,
que ven siempre el lado oscuro de las cosas, que temen los compromisos
que escapan a las responsabilidades,que se enfurecen ante la menor provocación y luego preguntan:
por que la gente no las busca,no las ama.
¿Quien podría amar a una persona así,a menos que se esté buscando la desgracia?
La base del amor humano comienza a revelarse cuando
dejamos de pretender que nos amen y comenzamos a dar más amor.
Leo Buscaglia.