En cierta ocasión, mientras deambulaba por el palacio, vio por primera vez en su vida un halcón real. Hasta entonces, Nasruddin jamás había visto semejante clase de paloma. De modo que tomó unas tijeras y cortó con ellas las garras, las alas y el pico del halcón.
-«Ahora pareces un pájaro como es debido» -dijo-. «Tu cuidador te ha tenido muy descuidado».
¡Ay de las gentes religiosas que no conocen más mundo que aquel en el que viven y no tienen nada que aprender de las personas con las que hablan!
Anthony de Mello
Muy bueno Fiaris. Cuantas personas de esas, que sólo lo suyo es lo correcto. Un abrazo
ResponderEliminarCreo que todos se aprende.
ResponderEliminarSaludos Fiaris.
No lo conocía.
ResponderEliminarMe gusta mucho!!!
Besos.
No lo conocía. Abrazos
ResponderEliminarNasruddín tenía una mente cuadriculada y no veía más allá... libertad de cada uno es sagrada y debemos respetar su forma de ser y de pensar...
ResponderEliminarMi abrazo, Fiaris.
M.Jesús
¡Qué gran enseñanza en tan pocas líneas! De plena actualidad en nuestros días.
ResponderEliminarCariñoso abrazo Fiaris
Hermosa enseñanza.
ResponderEliminarBesos 💐
Ay la ignorancia..!
ResponderEliminarTal cual, venimos a este mundo para realizar cada uno cierta tarea
ResponderEliminarCariños