Aŕbol que simboliza el amor paternal, llamado Cambá Nanbi por los guaraníes.
Cuenta la leyenda que un famoso cacique guaraní llamado Saguáa adoraba a su hija Tacuabé.
Esta se enamora de un cacique de una tribu lejana y abandona a su padre, quien desesperado sale a buscarla.
En su búsqueda afronta peligros y en su desesperación cree escuchar sus pasos en la selva, por lo que apoya frecuentemente el oído sobre la tierra.
Ya al límite de sus fuerzas, cae rendido por la fiebre y muere con el oído pegado a la tierra.
Cuando tiempo después los hombres de la tribu lo encuentran, descubren que su oreja está unida a la tierra, por lo que debieron cortarla para rescatar el cuerpo.
La oreja había echado raíces y dió origen al árbol Timbó o Cambá Nanbi, característico por sus frutos en forma de oreja.
No conocía la leyenda... Gracias por compartirla! Es triste, pero muy hermosa.
ResponderEliminarCariños y un abrazote enorme para vos!!
Me gusto la leyenda. Te mando un beso.
ResponderEliminar¡Qué bonita historia!
ResponderEliminarTeneis cantidad de leyendas relacionadas con la naturaleza.
ResponderEliminarSaludos
Curiosa historia. Un beso
ResponderEliminarNo la conocía.
ResponderEliminarGracias por compartirla.
Besos.
Preciosa esta leyenda y curioso fruto.
ResponderEliminarMuchos besos.
Una leyenda sorprendente, el límite del amor es impredecible. Un abrazo
ResponderEliminarViendo el fruto, el nombre del árbol estaba cantado, la leyenda ya es definitiva.
ResponderEliminarBesos.
Hermosa leyenda simbolizada en este árbol...El amor paternal, como el maternal son únicos y fieles, amiga Fiaris...Mi abrazo entrañable y mi ánimo, compañera.
ResponderEliminarUna historia conmovedora.
ResponderEliminarEl nombre de la hija me encanta.
Abrazos, amiga 🌸
Bonita leyenda.
ResponderEliminarFiaris. ¿Y será que comer de ese fruto nos despejará y agudizará el oído para escuchar sobre cosas en las que nos hemos venido haciendo los sordos? Va un abrazo.
ResponderEliminarUna historia muy emotiva sobre ese fruto de forma tan original. Un abrazo
ResponderEliminarUna leyenda muy ingeniosa! Y triste, me pregunto a qué sabrá ese fruto...
ResponderEliminarUn abrazo :)
Paseando por el barrio bloguero, paso por tu casa para dejarte un saludo y desearte un buen inicio de semana.
ResponderEliminar