Un ratón mirando por un agujero de la pared, ve al granjero y su esposa abrir un paquete. Quedó aterrorizado al ver que era una trampa para ratones. Fue corriendo al patio a advertirle a todos. Hay una ratonera en casa! hay una ratonera. La gallina que estaba cacareando y escarbando le dice: "disculpe sr. ratón yo entiendo que es un gran problema para usted pero a mí, no me perjudica en nada", entonces fue hasta el cordero y le dice lo mismo: "disculpe sr. ratón pero no creo poder hacer algo mas que pedir por ud. en mis oraciones", el ratón se dirigió a la vaca y ella le dijo: "¿pero acaso estoy en peligro? pienso que no! dijo la vaca", el ratón volvió a la casa, preocupado y abatido para encarar a la ratonera del granjero. Aquella noche se oyó un gran barullo como el de la ratonera atrapando su víctima, la mujer corrió a ver que había atrapado. En la oscuridad ella no vio que la ratonera atrapó la cola de una serpiente venenosa. La serpiente veloz mordió a la mujer, el granjero la llevo inmediatamente al hospital, ella volvió con fiebre alta. El granjero para reconfortarla le preparo una nutritiva sopa, agarro el cuchillo y fue a buscar el ingrediente principal: la gallina; como la mujer no mejoro los amigos y vecinos fueron a visitarlos, el granjero mato al cordero para alimentarlos, la mujer no mejoro y murió, el esposo vendió la vaca al matadero para cubrir los gastos del funeral.
La próxima vez que alguien te cuente su problema y creas que no te afecta por que no es tuyo y no le prestes atención, piensalo dos veces, el que no vive para servir no sirve para vivir. El mundo no anda mal por la maldad de los malos sino por la apatía de los buenos.Así que cuando alguien necesite de ti por sus problemas tiendele la mano o dale una palabra de aliento.
Parece lo de los judíos y los nazis.
ResponderEliminarUn abrazo.
Que gran verdad amiga mía. Una buena fabula. Muchos deberíamos aplicarnos el cuento.
ResponderEliminarUn abrazo Fiaris.
Es así como debería de ser nuestro comportamiento siempre Fiaris, darnos a los demás cuando lo necesiten.
ResponderEliminarAbrazos.
Una historia con moraleja y reflexión, Abrazos
ResponderEliminarEn los tiempos que corren, el individualismo es rey. Es tan difícil volver a los tiempos en que a la gente le importaban sus pares. Igual hay que seguir haciendo fuerza para que no se pierda del todo la solidaridad humana.
ResponderEliminarAbrazos.
Muy bien hilvanada la historia, con su atinada moraleja que me ha recordado a la siguiente cita:
ResponderEliminar“Tendremos que arrepentirnos en esta generación no tanto de las acciones de la gente perversa, sino de los pasmosos silencios de la gente buena” (Martin Luther King).
Un abrazo.
Nos están enseñando a que cada uno defienda su parcela y que le importe poco lo que pasa en la de al lado, ya ni en las comunidades de vecinos nos conocemos.
ResponderEliminarSaludos
Qué razón tiene la historia. Un beso
ResponderEliminarUma história maravilhosa e de reflexão. Uma excelente tarde minha querida amiga Fiaris.
ResponderEliminarsiempre hay que ser empatico y dar la mando a quien te lo pide si es posible ayudarlo. Te mando un beso
ResponderEliminarDar es maravilloso aunque no te lo devuelvan
ResponderEliminarMuy bonito mensaje y muy cierto, Fiaris. Un abrazo.
ResponderEliminarPara reflexionar, buena moraleja Fiaris.
ResponderEliminarUn abrazo
Buena lección de vida.
ResponderEliminarBesos.
Importantísima la moraleja que nos trae este cuento y sobre la que debemos reflexionar.
ResponderEliminarMil besos.
Bom final de semana minha querida amiga Fiaris.
ResponderEliminarSe fossemos solidários com Os problemas e sofrimentos dos nossos irmãos, talvez o mundo fosse melhor, não existisse tantos problemas de nação contra nação.
ResponderEliminarFiaris, tenha uma boa tarde de domingo.
Beijos.
Que belleza de relato y cuanta enseñanza nos deja, es una reflexión para llevarla con uno bajo el brazo.
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