Hôtan escuchaba la enseñanza de un maestro. La primera vez la asistencia era numerosa pero, poco a poco, a lo largo de los días que siguieron, el local se vació. Un día, finalmente, Hôtan estuvo solo en la sala con el maestro. Este le dijo:
—No puedo dar una disertación sólo para ti, y además estoy cansado.
Hôtan prometió volver al día siguiente con mucha gente. Pero al día siguiente acudió solo. Sin embargo, dijo al maestro:
—Puedes dar tu conferencia hoy, he traído una compañía numerosa.
Hôtan había llevado unas pequeñas muñecas que había instalado en la sala. El maestro le dijo:
—¡Pero si no son más que muñecas!
—En efecto —le respondió Hôtan—; pero todos los que han venido aquí no valen más que estas muñecas, no comprenden nada de tu enseñanza. Sólo yo he comprendido su profundidad y su verdad. Aunque hubiesen venido muchas personas, no serían más que rellenos, ornamentos, vacío sin fondo.
Muy buena apreciación y magnifica respuesta Fiaris.
ResponderEliminarUn gran abrazo amiga.
Qué bueno. Así somos, vamos por el mundo sin enterarnos de nada!
ResponderEliminarAbrazos
Muy buen ejemplo o metáfora. A veces la multitud pueden ser muñecos articulados, sin mente...No todo el mundo escucha y reflexiona, Fiaris.
ResponderEliminarMi abrazo y feliz abril, amiga.
Buena reflexión el que desea aprender lo hará y el que no solo irá y no lo apreciará. Te mando un beso.
ResponderEliminarNo hay que disertar en función del número de oyentes, sino para los que quieran entenderte.
ResponderEliminarUn abrazo.
Se nos escapa a veces lo primordial.
ResponderEliminarFeliz día Fiaris.
Un beso
Puede que el conferenciante no estuviera a la altura de los asistentes, hay que saber a quien se dirige uno cuando imparte una conferencia, cuando te la quieres dar de listo te quedas solo.
ResponderEliminarSaludos
Buen mensaje. Un beso
ResponderEliminarMuy bueno.
ResponderEliminarUn abrazo.
El alumno le dio una lección al maestro.
ResponderEliminarBesos.
Que cierto es, cuantas muñecas hay en todos sitios rellenando. Muy bueno
ResponderEliminarUn abrazo.
Boa tarde minha querida amiga Fiaris. Parabéns pelo seu excelente trabalho e matéria.
ResponderEliminarMuy buena reflexión!
ResponderEliminarBesos, guapa.
Muy interesante la manera de argumentar para convencer al maestro.
ResponderEliminarMil besos, Fiaris.